Hace no mucho tiempo una síndico llamada Liliana Ripoll dijo «Racing Club ha dejado de existir».
Y bueno.. Como se habrán dado cuenta «Democraciachina ha dejado de existir» (quienes suscriben lo sienten desde el mismísimo día que salió el imposible Chinese Democracy).
Pero así como Racing, el que había dejado de existir, inexplicablemente sigue jugando partidos todos los domingos (y hasta salió campeón), DC seguirá jugando su partido, de alguna u otra forma.
Por eso, gracias a todos y estén atentos, manténganse en sintonía que, llegado el momento, habrá noticias… Quizá desde podcasts… Quizá nos contrate el magnate chileno de El Cerdo…
De ocurrir recibirán notificación por mail quienes estén afiliados… A los que poseemos en los Facebooks respectivos les seguiremos dejando comentarios desubicados.
Éste ha sido un viaje inexplicablemente provechoso, y estamos seguros de que cuando nuestras positivamente movilizadas vidas se estabilicen un poco, podremos entender como seguir.